Ya no compro tomates para el invierno! Increíblemente fácil y delicioso.


Los tomates son un ingrediente clave en la cocina argentina, y conservarlos correctamente permite disfrutar de su sabor fresco durante todo el año.

En esta guía, te enseñamos cómo conservar tomates en el freezer para que puedas usarlos en salsas, guisos y otros platos incluso en invierno. Este método es fácil, rápido y ayuda a evitar el desperdicio de alimentos. Nos hemos ayudado con el siguiente video:

Ingredientes y Materiales Necesarios
Tomates frescos (la cantidad que desees)


Agua hirviendo

Bolsas de freezer o recipientes plásticos herméticos
Ajo (opcional)
Paso a Paso para la Conservación

  1. Preparación de los Tomates
    Lavá bien los tomates y retirá cualquier parte dañada.
    Colocá los tomates en agua hirviendo por aproximadamente 20 minutos para que la piel se afloje.
  2. Pelado y Procesado
    Retirá los tomates del agua caliente y dejalos enfriar.
    Una vez fríos, pelalos fácilmente.
    Podés dejarlos enteros, cortarlos en mitades o triturarlos con una licuadora según cómo los quieras conservar.
  3. Envasado
    Llená bolsas de freezer o recipientes herméticos con los tomates procesados.
    Si vas a usar los tomates para salsas o guisos, podés agregar un poco de ajo picado para dar más sabor.
    Cerrá bien los recipientes o bolsas y etiquetalos con la fecha.
  4. Almacenamiento
    Guardá los tomates en el freezer.
    Podés conservarlos hasta por un año sin que pierdan sabor ni textura.
    Consejos y Recomendaciones
    Porciones individuales: Dividí los tomates en porciones pequeñas para que sea más fácil descongelar solo la cantidad que necesitás.
    Evitar el exceso de agua: Si procesás los tomates, tratá de eliminar el exceso de líquido antes de congelarlos para que conserven mejor la textura.
    Descongelado rápido: Para usar los tomates, podés cocinarlos directamente congelados o descongelarlos a temperatura ambiente.
    Agregar sabor: Si querés mejorar el sabor de los tomates al cocinarlos, podés agregar hierbas como albahaca, orégano o laurel.
    Conservación más prolongada: Si querés conservar los tomates por más de un año, podés agregarlos a un frasco y cubrirlos con aceite de oliva.
    Conclusión
    Conservar tomates en el freezer es una forma sencilla y efectiva de disfrutar de su sabor y nutrientes durante todo el año. Este método permite ahorrar tiempo y dinero, evitando el desperdicio y asegurando que siempre tengas tomates frescos a mano para tus recetas favoritas. Probá este sistema y descubrí lo fácil que es tener tomates listos para cocinar en cualquier momento.