Tortilla de calabacín sin huevo


1 Calabacín
1 Cebolla
9 Cdas. Harina de garbanzo

9 Cdas. de Agua filtrada
AOVE
Sal marina o del Himalaya

Picamos la cebolla en cuadritos pequeñitos, yo el calabacín lo corté con un pelapatatas para que se hiciera antes. Si es eco lávalo bien y ponlo con piel. Lo sofreímos a fuego lento con poco aceite, no hace falta tanto aceite como para la tortilla de patata.
Mientras, en un bol añades la harina de garbanzo y el agua. Remueves bien hasta que quede una textura parecida al huevo (cremosa) y le añadimos sal al gusto.

Cuando esté pochada la cebolla le echo el calabacín. Con una espumadera quitaremos el aceite sobrante y lo iremos añadiendo al bol que teníamos preparado con la harina y el agua.
En una sartén que no se pegue (esto es fundamental) ponemos una gota de aceite y le echamos todo.

A fuego mínimo lo dejamos hasta que se dore y después, con la ayuda de un plato le damos la vuelta. Yo le doy por lo menos cuatro vueltas, dos por cada cara, para que así quede perfecta la forma.
Y ya tendremos una súper tortilla que no dejará a nadie indiferente.
También podéis cambiar el calabacín por patatas, espinacas, espárragos… por lo que más os guste!