4 chalotes en rodajas finas o cebolla
1 libra de tomates Roma o ciruela, cortados en rodajas, de ¼ de pulgada de grosor
5 cucharadas de aceite de oliva separadas
1 libra de papa amarilla, en rodajas de ⅛ de pulgada de grosor
1 taza de Queso Parmigiano-Reggiano o Queso Pecorino Romano rallado, aproximadamente 2 onzas, separadas
2 cucharadas de migas de pan panko integral, de arroz, garbanzos, almendras, etc o pan rallado sin harina, rallado grueso.
sal y pimienta
2 cucharaditas de orégano fresco, picado, separado
pizca de hojuelas de chile opcional
orégano para decorar
INSTRUCCIONES
Precaliente el horno a 400 °F (200 °C) y coloque la rejilla del horno en el medio.
Rebana finamente los chalotes. Ponga a un lado por ahora.
Corta los tomates en rodajas, de aproximadamente ¼ de pulgada de grosor. Colocar en un bol y sazonar ligeramente con sal y pimienta. Déjalos a un lado por ahora.
Condimentar con sal y pimienta. Si lo usa, agregue una pizca de hojuelas de chile.Caliente aproximadamente 1 cucharada de aceite de oliva en una cacerola pesada a fuego medio.Agregue los chalotes y saltee, revolviendo ocasionalmente, durante unos 6-8 minutos o hasta que estén suaves y translúcidos pero no dorados.
Mientras tanto, prepare la marinada de orégano batiendo: 2 cucharadas de aceite de oliva, 1 cucharadita de orégano fresco picado, ⅛ de cucharadita de sal y una pizca de pimienta.
Pela las patatas y córtalas en rodajas de ⅛ de grosor. Mézclelos en la marinada de orégano fresco.
Rocíe el fondo de una fuente de horno resistente al calor (bandeja para quiche de 7 pulgadas) con 1 cucharada de aceite de oliva.
Use aproximadamente la mitad de los tomates en rodajas para cubrir el fondo de la fuente para horno.
Cubra con una capa de chalotes salteados. Utilice la cantidad total.Espolvorea los tomates con el queso romano (¼ de taza).Coloque las rebanadas de papa en una sola capa con los bordes superpuestos sobre el queso. Use aproximadamente la mitad de la cantidad.
Repita con el resto de las rodajas de tomate, pero esta vez colóquelas en capas para que se superpongan.Coloque el resto de las rodajas de papa en una sola capa con los bordes superpuestos entre sí.
Rocíe la parte superior con 1 cucharada de aceite de oliva.
Hornee, sin tapar, en un horno precalentado (400 °F/200 °C) durante aproximadamente 1 hora o hasta que las papas se puedan perforar fácilmente con la punta de un cuchillo.
Retire con cuidado la cacerola del horno.
Espolvorea por encima el resto del queso (¾ de taza), el orégano fresco (1 cucharadita) y el pan rallado Panko.
Hornee por otros 15-20 minutos o hasta que la parte superior esté dorada y las papas estén bien cocidas.