800 g de filetes de merluza congelada sin espinas
1 puerro
3 huevos
200 ml de nata ligera
2 cucharas de tomate frito
1 cucharada de aceite de oliva
2 hojas de laurel
1/2 cebolla
Pimienta
Nuez moscada
Sal
Preparación
Sin descongelar, cocer los filetes de merluza congelada en abundante agua hirviendo con sal, las dos hojas de laurel, la cebolla y el puerro cortado en dos o tres trozos grandes. Pasados 10 minutos aproximadamente desde que el agua empieza a hervir, escurrir bien y meter en la nevera para enfriar.
Poner a precalentar el horno a 190º. Separar y picar el puerro y la cebolla.
Mientras se enfría, en una ensaladera batir los huevos, añadir la nata, remover y espolvorear un poco de pimienta, sal y nuez moscada.
A continuación, cuando el pescado esté templado, desmigarlo bien con las manos, procurando retirar cualquier espina que pudiera quedar, añadir las dos cucharadas de tomate frito, el puerro y la cebolla. Remover bien.
Verter la mezcla en un molde antiadherente pintado con una cucharada de aceite de oliva por todos los lados.
Hornear durante 35 minutos a 190º. Para comprobar que el pastel ya está hecho, pinchar con una aguja larga o utensilio puntiagudo y observar que sale seco.
Dejar enfriar y desmoldar. Se puede tomar acompañado con un buen ensalada verde, o solo con salsa de tomate o mayonesa.