500 g de calabaza (ya limpia)
150 gr de patatas
35 g de parmesano (rallado)
35 g pecorino (rallado) u otro queso
100 g provolone
1 huevo
pan rallado integral o sustituto
aceite de oliva virgen extra
sal
PREPARACIÓN DEL PASTEL DE CARNE DE CALABAZA
Corte la calabaza en rodajas finas, colóquela en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino y hornéela en un horno caliente en modo estático a 200 ° durante veinte minutos.Mientras tanto, lavar las patatas y cocerlas con toda la piel durante veinticinco minutos desde la ebullición.Pasar la calabaza cocida por un puré de verduras y recoger el puré en un colador de malla estrecha, para que pierda un poco de agua y se seque.
Cortar el provolone en cubos.Pelar las patatas, triturarlas en el puré de patatas y recoger el puré en un bol.Añadir también el puré de calabaza, 50 g de pan rallado, los quesos rallados, el huevo y una pizca de sal.Amasar todo hasta tener una mezcla homogénea.
Poner una hoja de papel de horno sobre una superficie de trabajo, espolvorear abundantemente con pan rallado y verter en ella la mezcla preparada.
Con ayuda de la hoja de papel de horno puesta debajo de la masa, darle forma de pastel de carne, luego volver a abrir el papel y aplanar el pastel de carne preparado formando casi un rectángulo.Disponer en el centro los dados de queso provola y volver a armar, siempre con ayuda de papel de horno debajo del pastel de carne.Vuelve a abrir el papel, echa un chorrito de aceite de oliva virgen extra por la superficie de la albondiga y vuelve a cerrarla en el papel apretando bien los extremos.Coloque el pastel de carne cerrado en una bandeja para hornear y hornee en un horno caliente, en modo estático, durante treinta, treinta y cinco minutos a 180 °.Retire del horno, deje que se enfríe y transfiera suavemente su pastel de carne de calabaza a un plato para servir, liberándolo del papel para hornear.Servir inmediatamente.