2 raciones
75 g a 80 g de avena arrollada
2 cdas semillas de chía, blanca o negra
C/n agua (*)
Gotas de jugo de limón natural o vinagre
¼ cdta sal rosa del Himalaya
⅛ cdta pimienta molida, de preferencia negra
PASO A PASO
Paso 1De la noche anterior colocar la avena y semillas en un recipiente. Cubrir con agua con gotas de limón o vinagre, de forma tal que todo quede humedecido. Que sobrepase aproximadamente un centímetro (tanto las semillas como los copos irán hidratándose y absorbiendo ese agua “de más”).
(*) se puede utilizar suero de leche, en cuyo caso no hace falta acidificar con limón o vinagre.
Paso 2
Por la mañana (cada uno lo hace a la hora que quiere, se entiende, la idea es que transcurran unas 12 hs), volcar el contenido en un recipiente apto para horno.
También pueden hacerse galletitas individuales.
Espolvorear la sal y pimienta.
Llevar al horno, que no hace falta que esté precalentado.
Paso 3
Hornear hasta que la superficie se haya dorado.