100 g de linaza
120 g de agua
1 cucharada de aceite de canola
2 cucharaditas de sésamo
2 cucharadas de semillas de calabaza
2 cucharadas de semillas de girasol
50 g de harina de almendras*
pizca de levadura en polvo
1/2 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de cúrcuma
Preparación:
1.) Vierta el agua sobre las semillas de lino y déjelas en remojo durante 20 minutos.
2.) Picar las semillas en trozos grandes.
3.) Agregue todos los ingredientes restantes a la linaza y mezcle bien. La masa debe ser firme pero fácilmente maleable y no desmenuzable.
4.) Tome porciones de la masa con una cucharita, colóquelas en una bandeja y presione para que queden planas. Esto se hace mejor con las manos ligeramente húmedas. Las galletas deben ser finas y agradables, luego estarán realmente crujientes.
5.) Rocíe la bandeja con un poco de agua y hornee las galletas en un horno precalentado a 200 grados arriba y abajo durante unos 15 a 20 minutos. Tenga cuidado de no oscurecerlos demasiado o se volverán amargos. Entonces, hacia el final del tiempo de cocción, es mejor mirar en el horno con más frecuencia.

