Dormir es fundamental para la salud, pero la posición en la que descansamos puede influir significativamente en el bienestar general. Aunque muchas personas encuentran cómodo dormir del lado derecho, esta postura presenta varias desventajas que vale la pena considerar.
Una de las principales preocupaciones está relacionada con la salud digestiva. Dormir del lado derecho puede favorecer el reflujo gastroesofágico, especialmente en personas con acidez estomacal o hernia hiatal.
Esto ocurre porque, en esta posición, el esfínter esofágico inferior se encuentra por debajo del nivel del contenido gástrico, lo que facilita que el ácido suba hacia el esófago, provocando ardor y molestias.
Además, esta postura puede afectar la circulación sanguínea. Al acostarse sobre el lado derecho, se puede ejercer presión sobre la vena cava inferior, una de las principales venas que transportan la sangre desde las piernas hacia el corazón.
Esto puede ser especialmente importante en personas con problemas circulatorios o durante el embarazo, ya que podría reducir el retorno venoso y causar hinchazón o sensación de pesadez en las extremidades inferiores.
Desde el punto de vista cardíaco, algunos estudios sugieren que dormir del lado izquierdo puede beneficiar más al corazón, ya que reduce la presión sobre este órgano.
Dormir del lado derecho, en cambio, podría aumentar ligeramente la carga cardíaca, aunque esto no es crítico para personas sanas, sí podría influir en quienes padecen enfermedades cardiovasculares.
Otro aspecto a tener en cuenta es la simetría corporal. Dormir siempre del mismo lado puede generar tensión muscular y desequilibrios en la postura, especialmente en el cuello, hombros y caderas. A largo plazo, esto podría derivar en molestias articulares o contracturas.
En conclusión, aunque dormir del lado derecho no es necesariamente perjudicial para todas las personas, sí conlleva ciertas desventajas que deben considerarse, especialmente en individuos con condiciones digestivas, circulatorias o cardiovasculares. Alternar posiciones o preferir dormir del lado izquierdo puede ofrecer mayores beneficios para la salud.
