Estos buñuelos de lentejas amarillas y calabacín son una opción deliciosa y nutritiva para un refrigerio o una comida.
Llenos de lentejas amarillas ricas en proteínas, calabacín fresco, tomates secos picantes y aceitunas sabrosas, estos buñuelos están sazonados a la perfección y fritos hasta que estén dorados y crujientes.
Tiempo de preparación:
Tiempo de preparación: 25 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Tiempo total: 55 minutos
Ingredientes:
200 g de lentejas amarillas
1 calabacín mediano
Sal (para condimentar y escurrir los calabacines)
1 cebolla mediana, finamente picada
1 diente de ajo picado
Aceite para freír
6-8 tomates secados al sol, finamente picados
40 g de aceitunas finamente picadas
85 g de harina de almendras
Sal al gusto
Pimienta negra al gusto
Hojuelas de chile, al gusto
Instrucciones:
Cocine las lentejas:
Enjuagar 200 g de lentejas amarillas con agua fría. Colocarlas en una olla con suficiente agua para cubrirlas y cocinarlas hasta que estén tiernas, unos 15-20 minutos. Escurrirlas y dejarlas enfriar.
Preparar el calabacín:
Ralla un calabacín mediano y añade una pizca generosa de sal. Déjalo reposar durante 10 minutos para eliminar el exceso de humedad. Después de 10 minutos, utiliza un paño de cocina limpio o una gasa para exprimir el exceso de agua del calabacín.
Sofreír la cebolla y el ajo:
Calienta un poco de aceite en una sartén a fuego medio. Agrega 1 cebolla mediana finamente picada y saltea hasta que esté transparente, aproximadamente 5 minutos. Agrega 1 diente de ajo picado y saltea durante otro minuto. Retira del fuego y deja enfriar un poco.
Mezclar los ingredientes:
En un bol grande, combine las lentejas amarillas cocidas, el calabacín escurrido, la cebolla y el ajo salteados, 6-8 tomates secados al sol finamente picados y 40 g de aceitunas finamente picadas. Mezcle bien.
Agregue la harina de almendras y el condimento:
Añade 85 g de harina de almendras a la mezcla. Sazona con sal, pimienta negra y hojuelas de chile al gusto. Mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien combinados.
Formar los buñuelos:
Tome pequeñas porciones de la mezcla y forme formas ovaladas, aproximadamente del tamaño de una nuez grande.
Freír los buñuelos:
Calienta el aceite en una sartén a fuego medio-alto. Fríe los buñuelos en tandas hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados, aproximadamente de 3 a 4 minutos por cada lado. Transfiérelos a un plato cubierto con papel toalla para escurrir el exceso de aceite.
Atender:
Sirva los buñuelos calientes, como aperitivo o guarnición. Disfrútelos con su salsa favorita o una ensalada fresca.
Sugerencias para servir:
Sirva con un acompañamiento de yogur griego o salsa tahini.
Combínalo con una ensalada verde fresca para una comida ligera y nutritiva.
Consejos de cocina:
Asegúrese de que el aceite esté lo suficientemente caliente antes de freír para evitar que los buñuelos absorban demasiado aceite.
Para una versión sin gluten, asegúrese de que todos los ingredientes utilizados estén certificados como libres de gluten.
Beneficios nutricionales:
Lentejas Amarillas: Ricas en proteínas y fibra, favorecen la reparación muscular y la digestión.
Calabacín: Bajo en calorías y alto en vitaminas y minerales.
Harina de Almendras: Aporta grasas y proteínas saludables.
Información dietética:
Sin gluten (asegúrese de que todos los ingredientes estén certificados como libres de gluten).
Vegetariano.
Consejos de almacenamiento:
Guarde los buñuelos sobrantes en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días.
Calentar nuevamente en una sartén o en el horno para que recupere su textura crujiente.
Por qué te encantará esta receta:
Estos buñuelos son una combinación perfecta de sabores y texturas.
Son fáciles de hacer y están llenos de nutrientes.
Ideal para un snack saludable o una comida ligera.
Conclusión:
Disfruta de los deliciosos y nutritivos buñuelos de lentejas amarillas y calabacín con tomates secos y aceitunas.
Estos buñuelos son perfectos para cualquier momento del día y seguro que se convertirán en los favoritos de tu hogar.