2 Berenjenas grandecitas
400grs de tomates cherry
1 mozzarella
1 o 2 dientes de ajo
1 rama de albahaca fresca
aceite virgen, sal, pimienta y azúcar.
Cortamos el rabito a las berenjenas, las abrimos al medio en sentido longitudinal y las sometemos a un baño obligatorio de agua con sal. Este preceptivo baño, conseguirá despojar a las berenjenas de su natural amargor.
Dejamos las berenjenas un mínimo de media hora en agua salada. Secamos con papel de cocina y hacemos unos rombos en la carne con ayuda de una puntilla (cuchillo pequeño) sin llegar a pinchar la piel.
Las metemos en un estuche de silicona para cocinar en micro, y, si no lo tenemos, en algún cacharro de vidrio cubierto por un plato, o, (aunque debemos evitarlo), por film transparente apto para micro.
Cocinamos las berenjenas 7 minutos a máxima potencia. Tienen que quedar algo blandas pero firmes aún.
Retiramos las berenjenas del micro y, con ayuda de una cucharita, las vaciamos de su carne y la picamos.
Disponemos las berenjenas vacías en una fuente de horno. Reservamos.
Escurrimos bien la mozzarella de su agua. La dejamos en un colador para que siga soltando líquido.
En una sartén amplia doramos 1 o 2 dientes de ajo muy picaditos. En cuanto coja un poquito de color el ajo, añadimos los tomates cherry cortados a la mitad.
Dejamos hacer los tomates unos 5 minutos. Añadimos sal, pimienta, una cucharadita de azúcar y la albahaca fresca. Incorporamos la carne de las berenjenas y dejamos hacer otros 4 minutos más.
Una vez terminado el sofrito de relleno, procedemos, precisamente, a rellenar con él los «cuerpos» de las berenjenas reservados mezclandos trozos de mozzarella con sofrito. Introducimos a horno ya caliente a 190º de temperatura durante 10 minutos
Y, como veis, en 7 minutos de micro, pocos más de sofrito, más otros 10 de horno, tendréis una comida deliciosa.