Albóndigas De Calabacín Y Avena


1 calabacín (unos 300 g)
1 cebolla
1 diente de ajo

90 g de copos de avena
Un poco de ralladura de limón
40 g de queso parmesano rallado

2 huevos (o 1 grande)
Orégano (o albahaca o cebollino…) (al gusto)
aceite de oliva

INSTRUCCIONES
EN COMPAÑIA
Lave, seque y ralle el calabacín, colóquelo en un paño de cocina limpio

Mientras tanto, picar la cebolla en trozos grandes y triturar el diente de ajo.
En el vaso del robot de cocina equipado con el cuchillo ultrablade, tritura la cebolla y el ajo en modo turbo durante unos segundos (no dudes en raspar los lados varias veces)

Cambie el cuchillo a la batidora, agregue aceite de oliva (1 cucharada) y ejecute el programa “Cocción lenta” P1, 130°C durante 4 minutos
Mientras tanto, escurra los calabacines tanto como sea posible en un paño de cocina limpio para eliminar la mayor cantidad de agua posible.

Deje que el robot se enfríe unos instantes y luego coloque la cuchilla para amasar/triturar. Vierta el calabacín escurrido, los copos de avena, el queso parmesano, los huevos, el curry/pimentón, el orégano, un poco de sal y pimienta.
Mezclar en modo manual, velocidad 5 durante 1 minuto (no dudes en raspar las paredes del vaso)
Dejar reposar en la nevera durante 30 minutos (el tiempo que se absorben bien los copos)

Precalentar el horno a 210°C
Forme albóndigas con las manos y colóquelas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino engrasado (hice unas quince)
Pintar las albóndigas con aceite de oliva
Metemos en el horno y bajamos el horno a 180°C.
Cuécelas unos veinte minutos dándoles la vuelta a la mitad de la cocción (el tiempo de cocción depende del horno y del tamaño de las albóndigas)

Para disfrutar caliente con ketchup o salsa de queso blanco
SIN ACOMPAÑANTE
Lave, seque y ralle el calabacín, colóquelo en un paño de cocina limpio
Mientras tanto, picar finamente la cebolla y machacar el diente de ajo.
Dorar la cebolla y el ajo en una sartén engrasada hasta que se vuelvan transparentes.

Mientras tanto, escurra los calabacines tanto como sea posible en un paño de cocina limpio para eliminar la mayor cantidad de agua posible.
En una ensaladera mezclar el calabacín escurrido, el ajo, la cebolla, la avena, el parmesano, los huevos, el curry/pimentón, el orégano, un poco de sal y pimienta.
Dejar reposar en la nevera durante 30 minutos (el tiempo que se absorben bien los copos)

Precalentar el horno a 210°C
Forme albóndigas con las manos y colóquelas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino engrasado (hice unas quince)
Pintar las albóndigas con aceite de oliva
Metemos en el horno y bajamos el horno a 180°C.

Cuécelas unos veinte minutos dándoles la vuelta a la mitad de la cocción (el tiempo de cocción depende del horno y del tamaño de las albóndigas)
Para disfrutar caliente con ketchup o salsa de queso blanco
CALIFICACIONES
¡Puedes variar el queso rallado y las hierbas según tus deseos!También se pueden cocinar en una sartén aceitada muy caliente, dándoles la vuelta también a mitad de la cocción.